Consulta presencial siempre.

Ayer por la tarde tuve dos consultas, la primera sin ningún problema y la segunda tampoco a no ser que la segunda persona que recibí me contó algo que no es que me pille desprevenido pero que nunca había escuchado de labios de la propia persona que lo sufre. No voy a desvelar la consultante ni su consulta; el tema va más allá. Toda persona que acude al tarot quiere ver por encima de su problema o ...su duda para poder tener una solución o por lo menos una esperanza de cambio. Esta segunda persona que atendí tenía muchos, muchos problemas. Se pasaba el tiempo llamando a muchos números 806 y acudiendo a diferentes sitios para poder tener un atisbo de luz en su camino y una mejora en sus vicisitudes. Tanto es así que cayó en manos de gente desalmada e indeseable que hace de los problemas de los demás su fuente de ingresos. Esta segunda persona tiene problemas, si, pero no es tonta, ahí se salvó de constantes amenazas telefónicas y vía mail a parte de promesas de recuperación a sus problemas milagrosas por la "módica" cantidad de 8.000 euros, sí, esa cantidad. Estas amenazas recibidas no eran ni de chantaje, ni de muerte, etc., eran peor aún. Le amenazaban con tener una vida desastrosa, con no poder nunca solucionar sus problemas, con tener aún más y más problemas, con llevar a cuestas hechizos, brujerías, males de ojos...; le amenazaban al fin con no poder tener felicidad ni tranquilidad a no ser que se sometiera urgentemente a ciertos rituales, limpiezas, despojos, etc... Como dije, esta segunda persona no accedió y de hecho no tiene trabajo alguno hecho como pude comprobar en las cartas.
Esta segunda persona sufre y todavía más sufrimiento tiene con este tipo de gente que va de profesionales de algo que se les queda grande y que ven en el mal ajeno una buen sistema para beneficiarse. Yo les aconsejaría que miraran cara a cara a personas como ésta mía de ayer y escucharan cara a cara sus problemas y vieran el miedo en sus ojos cuando cuentan éstas cosas, estas amenazas con una suerte terrible de por vida. También adevertiría a estas personas que se dedican a hacer estos desastres que la ley del universo es muy sabia y si es verdad que dinero fácil, fácil se va; también es cierto que por esta ley cualquier acción se recibe por triplicado, seamos justos en nuestras acciones y tratemos a las personas como una extensión de nuestro propio yo. Apoyando la consulta presencial siempre.