Dioses y Falos, historia de la adoración al sexo masculino.


 
 
En la historia de la creación del mundo en todas las religiones entra a jugar un papel importante en mayor o menor medida el falo de Dios para dar origen y sembrar su semilla cósmica. Como creador masculino tanto de manera implícita o explícita según la religión, su esperma siembra el universo de vida.

 


También existen Diosas creadoras pero hoy hablaré de los Dioses.

 

A diferencia de estas Diosas de la fertilidad con su gran exuberancia y mostrando sus atributos femeninos que se han exhibido por todo el mundo en estatuas, figurillas, libros de texto, la adoración a los Dioses fálicos ha sido en cierto modo velada…

 

En la mitología griega el dios Príapo tenía la forma de un pene y la devoción por esta divinidad estaba asociada con las buenas cosechas y la prosperidad económica. Para los sumerios, el pene no sólo era un órgano reproductor y transmisor de vida. Según los datos que proporcionan los últimos descubrimientos arqueológicos, el dios sumerio Enki tenía un pene con la fuerza de “un toro que embiste” y era capaz de eyacular sobre el Éufrates y llenarlo del agua que fluía. El relato mitológico continúa diciendo que cavó canales de irrigación con su pene, creó la reproducción sexual humana y procreó al primer hombre sobre la tierra al que le dijo: “¡Alaba ahora a mi pene!”.

 
 


Aunque si hubo un pene creador del universo fue el de la deidad egipcia Atum que, copulando con su mano a la que “convirtió en su cónyuge”, creó toda la vida de hombres y dioses. Pero la mitología no sólo pensó en potencia peneana, también en tamaños. A Buda le atribuyen el pene retráctil similar al de un caballo y el pene del dios hindú Shiva debía ser representado cabalgando sobre un toro y con una erección hasta el ombligo.





 Abraham tenía 99 años cuando el Padre Todopoderoso le promete, a cambio de ser el único dios para los hebreos, un hogar en Canaán y un hijo. El pobre anciano, por supuesto, tiene sus dudas con respecto a tener un hijo de su simiente a esa edad. Sin embargo, Dios le asegura que lo tendrá y le dice que todos los varones: “Serán circuncidados en la carne de sus prepucios como símbolo del pacto entre ustedes y yo.”



Ese acto que selló el pacto monoteísta de un único dios para los hebreos tuvo varias interpretaciones. Dejar el glande expuesto como en una erección se lo asoció, en algunos casos, a la práctica de un culto fálico primitivo. Otros arriesgaron que el propósito era reducir las relaciones sexuales debilitando el órgano reproductor para que los judíos sirvieran a Dios antes que a sus deseos. Más allá de todas las teorías que se entretejieron, lo cierto es que el pacto entre el ser más grandioso y misterioso del universo y los hombres se selló dejando su marca más importante en el lugar más importante del cuerpo de un hombre: el pene.

Desde el antiguo Egipto hasta nuestros días ha habido por todos los continentes Dioses que lucían un enorme falo achacable a su acto de reproducción, fertilidad, poder generativo, erotismo, dominio y acto apotropaico (mecanismo de defensa ante supersticiones por lo que adorar el falo o ejercitarlo como centro de poder te daba seguridad para no perder sus valores jerárquicos o sexuales).

 

India: En el shaivismo tántrico, un marcador simbólico, el lingam, fue usado para el culto fálico del deva hindú Shiva. En el arte representativo, el linga o lingam es una representación de Shiva como falo o pilar cósmico, como, por ejemplo, el mukhalinga. Este pilar es el foco de veneración en el templo hindú, y frecuentemente se coloca dentro de un ioni, indicando el equilibrio entre las energías creativas masculina y femenina. Estas esculturas aluden no sólo a la fertilidad, sino también a principios abstractos de creación.
 
 
 

Egipto: En el Antiguo Egipto había una leyenda de Osiris relacionada con el falo: el cuerpo de Osiris fue cortado en pedazos por Seth que los esparció por todo Egipto. Su esposa Isis halló todos salvo su pene, que había sido tragado por el pez oxirrinco. A pesar de eso, logró concebir mágicamente a Horus.

El falo fue un símbolo de fertilidad, y el dios Min era representado de modo ictifálico (con el pene erecto).
 
 

Grecia: En la mitología griega, Hermes, el dios mensajero, de fronteras y de intercambio, era considerado una divinidad fálica por asociación con representaciones suyas en hermas (pilares que fueron las primeras representaciones del Dios que se acumulaban en los caminos para la protección de los viajeros y comerciantes, estas apilaciones alcanzaban figuras que representaban penes “hermes erectis pudendis”). No hay consenso entre los estudiosos sobre si Hermes puede ser considerado una especie de dios de la fertilidad.

A Pan, hijo de Hermes, se lo representaba con un falo erecto exagerado.

 
 


Príapo fue un dios de la fertilidad, cuyo símbolo era un falo de dimensiones exageradas. Este hijo de Afrodita y de Dioniso o Adonis (según las distintas formas del mito original) era el protector del ganado, plantas frutales, jardines y genitales masculinos. El término médico priapismo (El priapismo es una enfermedad que causa intenso dolor, por la que el pene erecto (sus cuerpos cavernosos) no retorna a su estado flácido por un tiempo prolongado (más de tres o cuatro horas de duración). Sus causas son cierto tipo de medicamentos y drogas, aunque muchos casos son de etiología desconocida.) deriva, etimológicamente, del nombre del dios.
 
 

Roma: Los antiguos romanos usaban amuletos fálicos (fascinus) contra el mal de ojo. Los romanos además identificaban su dios Mercurio con el Hermes griego, con lo cual se decantaron a Roma los referentes del dios griego.




Precolombinos: La representación bien definida de los genitales externos, tanto femeninos como masculinos, en las figuras escultóricas y pictóricas expresa la naturalidad con que los nativos precolombinos se relacionaban con su sexualidad genital. Por ejemplo, las figuras de Kokopelli representan una divinidad con características fálicas. Kokopelli, dios de la fertilidad frecuentemente representado tocando la flauta, es aún venerado por algunos pueblos originarios en el suroeste de los Estados Unidos.
 
 

Escandinavia: El dios nórdico Freyr fue una divinidad fálica, representando la fertilidad masculina y el amor.
 
 

Japón: Hounen Matsuri es un festival de la fertilidad celebrado en el templo shinto Tagata Jinja, en Komaki, que sólo hasta tiempos recientes fue una zona agrícola. Es famoso por la procesión de un falo de madera de dos metros y medio. El objeto de culto no es el falo, sino la fertilidad de la tierra. Otra festividad es el Danjiri Matsuri. Kanamara Matsuri (en español Festival del falo de metal) es un festival sintoísta en honor a la fertilidad celebrado anualmente cada primavera en Kawasaki (Japón). Las fechas exactas varían, aunque la celebración principal tiene lugar siempre el primer domingo del mes de abril. El tema principal del evento es la veneración al pene, el cual se encuentra omnipresente durante todo el festival en forma de ilustraciones, dulces, decoraciones, vegetales esculpidos e incluso en un mikoshi.





Las celebraciones del festival tienen lugar alrededor de un templo local en veneración al pene, el cual en el pasado era popular entre prostitutas que rezaban para pedir protección ante enfermedades de transmisión sexual. El templo también simboliza la protección divina para la prosperidad de los negocios y del clan, los alumbramientos, el matrimonio y la armonía en las parejas casadas.

China: El Dios Buluotou se celebra en los primeros días del año para fecundar de prosperidad el año entrante.



África occidental: Legba y Eshu. Los Yoruba de Nigeria. El falo ha sido visto desde hace mucho como símbolo del poder masculino, preservar las condiciones y funciones del falo hacen que todo hombre se sienta potente, creador y dominador.

 
 
 


Wicca: Cernunnos: Los druidas le llamaban  Dios Cornudo de la fertilidad, se lo representaba, sentado en la posición del loto, con cuernos sobre la cabeza, cabello largo rizado, barba, desnudo, con el miembro viril erecto y, a veces, portador de una lanza y un escudo. Él representa a algunos de los aspectos fundamentales de la vida, y es señor de la mitad oscura del año. Este y otros atributos lo asocian con la producción y la fertilidad.

 


En ciertas culturas se depositaba un falo simbólico en las tumbas para un próximo renacimiento del difunto recreando el poder regenerativo del Sol.

 

El falo solo es adorado en estado de erección, como fructificador y dador de vida se asimila al don de la divinidad.

 

En el cristianismo el culto al falo sobrevivió como "el enemigo" representado como el Diablo, semejante a Pan.

 


En Almárgen (Murcia) existe aún un ídolo precristiano la que se adora como símbolo de fertilidad y se le busca para que las mujeres queden embarazadas.

 


Deuteronomio 23:1 “No podrá entrar en la asamblea del Señor ningún hombre que tenga magullados los testículos o mutilado el pene”

 

Samuel 18:25-27 Pero Saúl insistió: —Díganle a David: "Lo único que el rey quiere es vengarse de sus enemigos, y como dote por su hija pide cien prepucios de filisteos."
 
 

 
Éxodo 4:24-25 Ya en el camino, el Señor salió al encuentro de Moisés en una posada y estuvo a punto de matarlo. Pero Séfora, tomando un cuchillo de pedernal, le cortó el prepucio a su hijo; luego tocó los pies de Moisés con el prepucio y le dijo: «No hay duda. Tú eres para mí un esposo de sangre.»
 

Ezequiel 16:17 “Con las joyas de oro y plata que yo te había obsequiado, hiciste imágenes masculinas, y con ellas te prostituiste ofreciéndoles culto”


 

Comentarios

  1. Muy interesante articulo y que debe ser enseñado en las escuelas y colegios publicos y privados!! Deberian enseñar educacion sexual en los colegios como curso y materia importante!! Ese es el desafio de la educacon en el siglo 21.

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    1. gracias por tu interés, se nota que eres una persona moderna e inteligente. Saludos.

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  2. He leído tú nota. Realmente interesante. Le hashas dado un completo vistazo a religiones y a creencias mitológicas de diversas cultura de una manera objetiva.

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    1. Gracias, es sólo un resumen de tanto que hay sobre los mitos fálicos...

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  3. Gracias por este artículo,pues me da más claridad sobre la potencia energética y creadora para divinisar el ser...

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